El artículo Neurodiversidad de la Wikipedia en español no puede comenzar de un modo más desafortunado al decir que consiste en «un concepto eufemístico». Sinceramente, me ha decepcionado pero no me ha extrañado.
Con mucha frecuencia, los aspectos relacionados con la neurodiversidad se han enfocado de manera muy simplista. Incluso ha habido que matizar la creencia popular de que la socióloga Judy Singer acuñase el término en 1998. Al igual que tantos descubrimientos en ciencia, resultado de un esfuerzo colectivo, el nacimiento del vocablo surgió en comunidad. Concretamente en 1996, en una lista de correo del grupo Independent Living on the Autistic Spectrum ya se hablaba sobre «la diversidad neurológica de las personas».
Claro que, más allá de esta condición neurológica, inherente a cada individuo, están los trastornos sobrevenidos por el entorno en forma, por ejemplo, de ansiedad o depresión. «La tesis doctoral es perjudicial para la salud mental», rezaba un titular de hace seis años. Un peligro, extensivo a todas las exigencias y dificultades de la carrera científica, que cada vez se hace más visible.
Por eso, amigas y amigos polivulgadores, os invitamos a escribir sobre el amplísimo espectro de las cuestiones sobre salud mental. Puede tratar sobre la condición de personas dedicadas a la ciencia de todas las épocas, sobre la propia neurodiversidad o quienes la investigan, o incluso vuestro propio testimonio dentro del mundo académico. Para ello, debéis publicar un tuit con el enlace a vuestro texto o hilo el próximo 15 de abril, el hashtag #PVneurodiversa y mención a @hypatiacafe.
¡Salud y diversidad, polivulgadores! Esperamos con ilusión vuestros relatos.
Café Hypatia 